«UN ESTADO DE ÁNIMO «; (Marc Pérez Fernández, 2/02/2003)
Alguien dijo hace tiempo que el fútbol, en esencia, es un estado de ánimo. Y es que la convicción de sentirse enrachado, la fortaleza mental de creerse capaz, la virtud de saber extraer de uno mismo todas sus cualidades y la tranquilidad de percibir un entorno que te arropa en todo momento, son como ya sabemos elementos fundamentales en todos los aspectos de la vida, y en el caso del fútbol, todo esto no es ninguna excepción. Y es que la plantilla actual del FC Barcelona es como un espejo.
Mirarlo partido tras partido es ver con claridad todos los males de un club, que refleja en su juego el nerviosismo, la depresión, la ansiedad y la impotencia de una institución en clara decadencia desde hace 5 años. Ver al Barça como pierde y no es capaz de levantarse, asimilando con cansina dejadez todas sus carencias, es una sensación frustrante, porque uno admite con dolor que esta institución esta tocada de muerte desde hace años. Con lo cual el juego de la plantilla, en la competición actual, es tan solo la prolongación en el cesped de un entorno enrarecido y que con un olor a podrido, sacude los cimientos del club y deja sin oxígeno a los propios jugadores.
Gaspart en la presentación de Antic, ha admitido ya con resignada dureza, que como presidente esta en la U.V.I., y que sus amigos y directivos impiden con su apoyo numantino, que la gente entre a darle la extremaución. Y es que en esta rueda de prensa, Gaspart por primera vez, ha asumido que el Barça esta gravemente enfermo. Su actitud le ha llevado a ver la oscuridad de un pozo, en el que no ve el fondo, y claro, a Gaspart como a todos nosotros nos da pavor solo bromear con la posibilidad de que una institución histórica como es el FC Barcelona, descienda a segunda. Pero el mal ya esta hecho, y al final de temporada habrá que pedirle explicaciones, en un acto de responsabilidad hacia el club, de un Gaspart que tendrá que dimitir.
Mientras tanto, la historia nos grita a todos. Desde Gamper esté donde esté, pasando por Samitier, Kubala, Helenio Herrera, etc. todos nos piden unión y que saquemos a este club de donde está. Nuñistas y Cruyffistas, las dos corrientes de opinión y odio en este club, han de hacer un esfuerzo y dejar de pensar en ellos. Los medios han de apoyar y la oposición también. El Barça esta por encima de personalismos, ya que es un sentimiento que no solo define a todo un pueblo, sino que reune en sus colores el amor y la estima de millones de aficionados repartidos por los cinco continentes. Así pues apelemos al orgullo de ese sentimiento y recuperemos la autoestima. Solo así transmitiremos la confianza y la tranquilidad a unos jugadores que estan desquiziados y no pueden dar todo lo que llevan dentro. Tenemos que hacerlo como un servicio al club, aunque ayudaría el pronunciamiento de Gaspart garantizando su marcha a final de temporada, para apaciguar el entorno. Pero con la frase dicha en la presentación de Antic, Gaspart ha asumido que el serbio es su último cartucho y que la presión ya no la podrá soportar. Así pues, salvemos al Barça. Esta institución es la que nos importa y en ella tenemos que volcar todas nuestras ilusiones y esfuerzos, a partir de ya.
Por su parte Antic ha entrado con muy buen pie. Sus primeras palabras han sido de orgullo de llegar a un club que admira por su grandeza y respeta por lo que significa para Catalunya, para sus socios y para los aficionados de fuera de esta tierra. Esas palabras me han llegado, y aunque algunos tengamos prejuicios sobre él, hay que creer en su capacidad para salir del pozo en el que estamos. No nos queda más remedio.
Marc Pérez Fernández – socio 951 – Barcelona
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